The Buckthorn Problem

How To ID and Eradicate European Buckthorn

European buckthorn (Rhamnus cathartica) is one of the most persistent invasive plants in the Midwest and northern U.S. Originally brought over as a hedgerow and ornamental plant, it’s now a dominant threat in woodlands, savannas, fencerows, and even urban landscapes. For landscape contractors and land managers, learning to identify and control buckthorn is an essential part of protecting biodiversity and native landscapes.

Why It’s a Problem

European buckthorn is highly adaptable and aggressive. It leafs out earlier than native plants and stays green late into the fall—robbing other plants of sunlight for a longer portion of the year. Its dense canopy and fast growth form impenetrable thickets that displace native species. The berries, while abundant and readily eaten by birds, are low in nutritional value and act as a laxative—helping seeds spread far and wide.

Beyond crowding out native plants, buckthorn:

  • Disrupts soil composition and microbial communities.

  • Degrades wildlife habitat.

  • Increases erosion due to sparse groundcover beneath its thickets.

  • Hosts pests like crown rust and soybean aphid, impacting agricultural systems.

How To Identify European Buckthorn

Here’s how to confidently spot this invasive shrub or small tree:

  • Leaves: Dark green, glossy, and elliptical with finely serrated margins. Leaves often remain on the plant well into late fall.

  • Leaf arrangement: Technically sub-opposite to opposite, but often appears alternate or irregular.

  • Height/Form: Typically 10–25 feet tall, forming dense, multi-stemmed thickets.

  • Bark: Gray-brown with lighter horizontal lenticels. When scraped, the inner bark shows an orange hue, and the wood underneath is yellow.

  • Twigs: Often tipped with a small thorn at the end—hence the name “buckthorn.”

  • Fruit: Small, round, black berries in late summer and fall; persist into winter. Do not eat—the seeds are toxic and cause laxative effects.

Pro tip: If it’s still green in November and growing in a dense thicket, it’s likely buckthorn.

Eradication Techniques

Eradicating European buckthorn requires a combination of methods and ongoing follow-up. Here's what works:

1. Manual Removal (Best for Small Infestations)

  • Tools: Use loppers, pruning saws, and specialized uprooting tools like the Weed Wrench or Root Talon.

  • Timing: Easier to pull in spring or fall when soil is moist.

  • Safety: Wear gloves and eye protection—the branches are sharp.

  • Stump Treatment: After cutting, immediately apply glyphosate or triclopyr herbicide to the stump to prevent resprouting.

2. Chemical Control (For Medium to Large Infestations)

  • Cut-Stump Treatment: Effective during the dormant season (late fall to early spring). Apply glyphosate or triclopyr directly to freshly cut stumps.

  • Basal Bark Treatment: Apply a 20-30% solution of triclopyr ester in a bark oil carrier to the lower 12–18 inches of intact stems. Works best when leaves are off.

  • Foliar Spray: For dense thickets of seedlings, low-volume foliar application of triclopyr or glyphosate may be appropriate—but use caution around native plants.

Always follow label instructions and avoid overspray, especially near water or valuable ornamentals.

3. Preventing Regrowth

  • Buckthorn has a strong seed bank—a reservoir of viable seeds that remain dormant in the soil and can germinate for several years after the parent plants are removed.

  • Expect new seedlings for 3–5 years after removal.

  • Schedule annual follow-up visits to pull or treat regrowth.

  • Mulching cleared areas and planting native shrubs or groundcovers can help suppress new buckthorn growth.

4. Ecological Tools (for Open Areas)

  • Prescribed fire and mechanical mowing can be effective in oak savannas or prairie edges, especially to control seedlings.

  • Grazing (e.g., with goats) has shown some success in restoration settings.

Long-Term Management

One-time removal isn’t enough. Buckthorn control is a long-term commitment. Regular monitoring and follow-up treatments—especially in the first 3–5 years—are key. Equally important is replanting cleared areas with native species to restore ecological function and prevent reinvasion.

Good native replacements for cleared areas include:

  • Shrubs: Gray dogwood (Cornus racemosa), American hazelnut (Corylus americana), blackhaw viburnum (Viburnum prunifolium), and serviceberry (Amelanchier spp.)

  • Trees: Bur oak (Quercus macrocarpa), hackberry (Celtis occidentalis), ironwood (Ostrya virginiana)

Final Thoughts

For landscapers, contractors, and landowners, buckthorn is more than a nuisance—it’s a serious threat to the health of our natural landscapes. By identifying and removing it carefully, and following up with thoughtful native restoration, we can make a meaningful difference.

If you need help identifying buckthorn on a client’s property, or you’re looking for native replacement options, we’re here to help. Reach out to our nursery team for advice or restoration plant suggestions tailored to your site.

A thicket of buckthorn in a northern Illinois woodland

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Cómo Identificar y Erradicar el Espino Cerval Europeo

El espino cerval europeo (Rhamnus cathartica) es una de las plantas invasoras más persistentes en el Medio Oeste y el norte de EE.UU. Originalmente introducida como planta ornamental y para cercas vivas, hoy representa una amenaza dominante en bosques, sabanas, cercas rurales e incluso paisajes urbanos. Para contratistas de paisaje y manejadores de terrenos, aprender a identificar y controlar esta planta es esencial para proteger la biodiversidad y los ecosistemas nativos.

¿Por Qué Es Un Problema?

El espino cerval europeo es sumamente adaptable y agresivo. Brota antes que las plantas nativas y mantiene sus hojas verdes hasta muy avanzado el otoño, robando luz solar a otras especies por un periodo más largo del año. Su denso follaje y rápido crecimiento forman matorrales impenetrables que desplazan a la vegetación nativa. Sus frutos, aunque abundantes y consumidos por aves, son de bajo valor nutritivo y funcionan como laxante, lo que facilita la dispersión de sus semillas a gran escala.

Además de desplazar plantas nativas, el espino cerval:

  • Altera la composición del suelo y las comunidades microbianas.

  • Deteriora el hábitat de la fauna silvestre.

  • Aumenta la erosión por la falta de cobertura vegetal bajo sus matorrales.

  • Hospeda plagas como la roya de la corona y el áfido de la soya, afectando sistemas agrícolas.

Cómo Identificar el Espino Cerval Europeo

Aquí te explicamos cómo reconocer con seguridad este arbusto o árbol pequeño invasor:

  • Hojas: Verde oscuro, brillantes, elípticas y con bordes finamente dentados. Suelen permanecer en la planta hasta bien entrado el otoño.

  • Disposición de las hojas: Sub-opuestas u opuestas, pero muchas veces se ven alternas o irregulares.

  • Altura y forma: De 3 a 8 metros de altura, formando matorrales densos y multirramificados.

  • Corteza: Marrón grisáceo con lenticelas horizontales más claras. Al rasparla, la corteza interna es anaranjada y la madera subyacente es amarilla.

  • Ramas: A menudo terminan en una pequeña espina—de ahí el nombre “espino cerval.”

  • Fruto: Bayas negras, pequeñas y redondas que aparecen a finales del verano y en otoño; pueden persistir en invierno. No se deben consumir—sus semillas son tóxicas y tienen efecto laxante.

Consejo práctico: Si ves un arbusto verde en noviembre creciendo en un matorral denso, probablemente es espino cerval.

Técnicas de Erradicación

Erradicar el espino cerval europeo requiere una combinación de métodos y seguimiento constante. Aquí te decimos lo que funciona:

1. Remoción Manual (Ideal para Infestaciones Pequeñas)

  • Herramientas: Podadoras, sierras de poda y herramientas especializadas para arrancar raíces como Weed Wrench o Root Talon.

  • Época: Más fácil de arrancar en primavera u otoño cuando el suelo está húmedo.

  • Seguridad: Usa guantes y protección ocular—las ramas son puntiagudas.

  • Tratamiento de tocones: Después de cortar, aplica de inmediato herbicida con glifosato o triclopir sobre el tocón para evitar el rebrote.

2. Control Químico (Para Infestaciones Medias o Grandes)

  • Tratamiento de tocón cortado: Efectivo en temporada de latencia (finales de otoño a principios de primavera). Aplica glifosato o triclopir directamente en los tocones recién cortados.

  • Tratamiento de corteza basal: Aplica una solución de 20–30% de triclopir éster en aceite portador sobre los primeros 30–45 cm del tallo intacto. Funciona mejor cuando la planta no tiene hojas.

  • Rociado foliar: Para matorrales densos de plántulas, se puede usar una aplicación foliar de bajo volumen con glifosato o triclopir—pero con mucho cuidado si hay plantas nativas cerca.

Siempre sigue las instrucciones de la etiqueta del herbicida y evita la deriva de rocío, especialmente cerca de cuerpos de agua o plantas ornamentales.

3. Prevención del Rebrote

El espino cerval tiene un banco de semillas muy activo—sus semillas pueden permanecer viables en el suelo por varios años tras la remoción de las plantas adultas.

  • Espera nuevas plántulas durante 3 a 5 años después de la eliminación inicial.

  • Programa visitas anuales para retirar o tratar el rebrote.

  • Cubrir con mantillo las áreas limpias y plantar arbustos nativos o coberturas vegetales puede ayudar a suprimir el nuevo crecimiento.

4. Herramientas Ecológicas (Para Áreas Abiertas)

  • Las quemas prescritas y el desbroce mecánico pueden ser efectivos en sabanas de roble o márgenes de pradera, especialmente para controlar plántulas.

  • El pastoreo (por ejemplo, con cabras) ha mostrado buenos resultados en proyectos de restauración.

Manejo a Largo Plazo

Eliminarlo una sola vez no basta. Controlar el espino cerval es un compromiso a largo plazo. El monitoreo regular y los tratamientos de seguimiento—especialmente en los primeros 3–5 años—son claves. Igualmente importante es replantar con especies nativas para restaurar la función ecológica y prevenir una nueva invasión.

Buenas opciones de reemplazo nativo incluyen:

  • Arbustos: Cornejo gris (Cornus racemosa), avellano americano (Corylus americana), viburno negro (Viburnum prunifolium) y amelanchier (Amelanchier spp.).

  • Árboles: Encino bur (Quercus macrocarpa), almez (Celtis occidentalis), carpe americano (Ostrya virginiana).

Consideraciones Finales

Para paisajistas, contratistas y propietarios de terrenos, el espino cerval es más que una molestia: es una amenaza seria para la salud de nuestros paisajes naturales. Al identificarlo y eliminarlo con cuidado, y seguir con una restauración nativa bien pensada, podemos marcar una diferencia real.

¿Necesitas ayuda para identificar espino cerval en la propiedad de un cliente? ¿O buscas opciones nativas para replantar? Nuestro equipo en el vivero está aquí para ayudarte. Contáctanos para recibir asesoría o recomendaciones de plantas adaptadas a tu sitio.

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